Como Movimiento de Trabajadores Campesinos respaldamos la consulta de Buena Fe de las comunidades Q´eqchi´ de Cahabón sobre los proyectos hidroeléctricos Oxec y Oxec II, que se realiza el próximo domingo 27 de agosto. Adherimos a su comunicado reafirmando el derecho de los pueblos y sus autoridades a decidir sobre sus territorios según sus propios procedimientos y normatividad.
Rechazamos la contraofensiva empresarial y gubernamental en contra de los derechos de los pueblos indígenas que se ha expresado en diversas acciones, pero sobre todo con la intención de anular en la práctica y despojarnos del Convenio 169 de la OIT coartando el ejercicio a la libre determinación de los pueblos, a través de la sentencia de la Corte de Constitucionalidad sobre Oxec y la guía de consultas que recientemente presentó el organismo ejecutivo que tergiversa, restringe y anula la consulta de buena fe.
Los grupos oligárquicos han identificado a los Pueblos Indígenas y las comunidades en resistencia como el principal obstáculo para imponer el modelo económico extractivista y por eso pretenden detener cualquier oposición a su proyecto de muerte y cualquier avance en favor de los derechos de los pueblos originarios. Han lanzado campañas difamatorias, procesos judiciales, órdenes de captura, militarización de lugares donde se ha levantado la resistencia y acciones represivas para quebrar la lucha y resistencia por la defensa de la vida, el agua, el territorio y la Madre Tierra.
Ante este panorama reafirmamos nuestro derecho constitucional a la resistencia dentro del ejercicio a la libre determinación, a construir nuestras propias expresiones de poder popular y articular la unidad de acción de los Pueblos y sus organizaciones. Es una respuesta justa y necesaria ante la pretensión de violar el derecho a la Consulta Libre, Previa e Informada de los pueblos indígenas de Iximulew.